.jpeg)
Con la llegada de la menopausia no sólo comienzas a sufrir ciertos síntomas como sofocos o un mayor cansancio , sino que también tiendes a engordar y a acumular grasa en ciertas zonas del cuerpo. Esto es lo que se encontró la nutricionista Petronella Ravenshear, que vio cómo por mucho que controló su alimentación e hizo ejercicio, pasó de los 54 kilos a los 63 casi sin darse cuenta.
«El consejo de comer menos y hacer más ejercicio es erróneo e injusto. Los que seguimos ese consejo estamos destinados a fracasar, lamentablemente. He visto a demasiadas personas que han hecho demasiado ejercicio y han comido poco en su desesperación por perder peso y lo único que han conseguido es desmoralizarse«, asegura la británica.
ARTÍCULOS DESTACADOS
El método japonés para perder grasa abdominal que solo te llevará un minuto al día
El error que te impide adelgazar a partir de los 40 años:
Esta situación fue la que le llevó a idear un método de alimentación que le permitió adelgazar nueve kilos sin sufrir lo más mínimo. La llamó la Dieta del Ser Humano, una forma de alimentarse similar a la dieta mediterránea que prioriza los alimentos de calidad, eliminando ultraprocesados y aportando al organismo los macro y micronutrientes necesarios para activar el metabolismo.
De este modo, esta nueva dieta reduce la inflamación, estabiliza los niveles de insulina y mejora el bienestar general. Al alejarte del consumo de procesados, el cuerpo se desintoxica, y te sientes con más energía, recuperando la vitalidad perdida después de años llevando una nutrición inadecuada.
«Uno de los emocionantes efectos secundarios de seguir el programa HBD es la pérdida de peso, pero también mejora la energía, obtienes más resiliencia y una perspectiva más brillante de la vida, junto con niveles estables de azúcar en la sangre, hormonas reequilibradas y una resolución de muchas condiciones dolorosas«, explica la creadora del método.
En qué consiste la Dieta del Ser Humano
Los primeros tres meses de la Dieta del Ser Humano se basan en alimentos ricos en macronutrientes que facilitan la limpieza del organismo. Durante los primeros días, se busca un reseteo restringiendo la ingesta calórica entre 700 y 900 Kcal. Pero las calorías no bajan por una reducción de la cantidad de alimento, sino porque se consumen alimentos vegetales, que son ricos en nutrientes e hipocalóricos.
Después, se introducen las proteínas de alta calidad (donde destaca el pescado, los huevos, el pollo y el pavo) y las grasas saludables. La planificación de consumo de alimentos permite aprovechar mejor los nutrientes de cada alimento, sin mezclar macronutrientes en una misma comida. Es decir, si ya tenemos una proteína de calidad, no se toma junto a otro alimento que contenga proteínas.
Esta dieta es muy beneficiosa porque se centra en consumir alimentos de calidad y entiende que el éxito de un plan de alimentación que nos mantenga en nuestro peso ideal pasa por alcanzar el equilibrio entre las calorías que consumimos y las que quemamos.
De este modo, prioriza alimentos no procesados y de origen vegetal, limita el consumo de azúcares y no recurre a productos proteicos sustitutivos. Esto último facilita el seguimiento del plan a largo plazo y mejora los síntomas de la menopausia.
Eso sí, los expertos recomiendan hacer un seguimiento con un profesional, puesto que esta forma de alimentación puede estar contraindicada en algunos casos como si tienes ciertas deficiencias de micronutrientes o algunas patologías previas o incluso ocultas.